¿Cómo distinguir pods desechables registrados de dispositivos ilegales?

La fama de los pods desechables sube como la espuma. Al ser dispositivos pequeños, manejables y de un tamaño tan reducido, resultan muy cómodos para el usuario. Además, no precisan recargar líquidos, baterías o sustituir resistencias. Todo ello, sumado a la intensa experiencia de sabor para el paladar, hace que estos pods hayan ganado más y más notoriedad en el mercado.

Igual que ocurre con cualquier producto de éxito, a raíz de esta fama han surgido dispositivos de dudoso origen y calidad. Su aspecto exterior puede ser muy similar, pero debemos tener cuidado e informarnos acerca de lo que estamos comprando. Por eso, hoy queremos ilustraros con una serie de puntos que debéis tener en cuenta para estar tranquilos:

Cantidad de nicotina máxima

Como muchos ya sabréis, la ley TPD que sigue las directrices de la normativa europea, solo permite la distribución de líquidos con una concentración de nicotina del 2%, es decir, 20 mg como máximo. Así, se busca aumentar la calidad y la seguridad de los productos para el vapeo.

Por esta razón, haz saltar todas las alarmas si das con un dispositivo desechable que se encuentre fuera del margen entre el 0% y el 2% de nicotina.

Capacidad máxima

La ley TPD también indica que la capacidad de los dispositivos no puede superar los 2ml. No existen dispositivos desechables registrados con una capacidad superior a esta.

Número de caladas

¡Atento si encuentras dispositivos de más de 600 caladas! Este será un claro indicador de que el pod no está registrado. ¿Por qué? La respuesta es sencilla: un dispositivo de tan solo 2ml jamás podrá tener una durabilidad tan elevada. 

Por tanto, si tenemos en cuenta los puntos anteriores, rápidamente podemos llegar a la conclusión de que ofrecer tantas caladas es una señal evidente de que no se está respetando la capacidad máxima de 2ml. También es posible que se esté prometiendo un rendimiento que no se corresponde con la realidad.

Etiquetado en español

Las etiquetas de un producto son el escaparate principal del mismo. Observando el etiquetado de tu pod, extraerás mucha información del dispositivo y, por supuesto, también será útil para desenmascarar pods no registrados. 

Por normativa, todo el etiquetado debe estar en español.  Si recibes un pod con etiquetas en otro idioma, desconfía de él.

EC-ID/Número de registro

Si todavía tienes dudas con algún dispositivo, el número de registro o EC-ID será tu mayor aliado. Tanto si compras pods desechables para consumo personal, como si los comercializas como empresa, con este número te aseguras de que el material que te ofrecen es 100% legal. 

Para obtenerlo, solo tienes que pedírselo al vendedor o distribuidor que te lo haya proporcionado. Si tu pod no cuenta con EC-ID, ¡estás ante un dispositivo ilegal!

Problemas que acarrea la compra y venta de pods no registrados

- Supone un peligro para la salud: los pods ilegales no siguen la normativa adecuada. Incluir más nicotina de la permitida es un gran riesgo para la salud, ya que esta sustancia, en exceso, afecta al sistema cardíaco y tiene efectos carcinogénicos.

Además, al estar creados por fabricantes de origen desconocido y no pasar inspecciones, no se conoce a ciencia cierta si el resto de componentes son adecuados y siguen las recomendaciones sanitarias.

Pueden ser peligrosos, ¡no te arriesgues!

- Conlleva sanciones: La comercialización de estos productos implica sanciones y multas no solo para los grandes distribuidores, sino también para los pequeños comercios que los vendan.

Esto además de ser un contratiempo económico, crea una imagen poco profesional que cuesta disipar. La credibilidad que depositan tus clientes en ti es fundamental. ¡No juegues con tu negocio!